Nueva Encuesta

Chicas! Ya quedó esto, bueno la opción ganadora fue... Cronicas Vampíricas, soooo ahora vamos con otro detalle porque me he fijado en variiias cosas, dejarçe la encuesta hasta fin de año, como varias votaron por Eternial, veré que sea un proyecto a futuro no se preocupen porque me gusta consentirlas. Voten en la nueva encuesta====> las quieroo

lunes, 27 de septiembre de 2010

07: Problemas


Las células se agrupaban en un montón de burbujas, con un núcleo central, mi vista comenzaba a cansarse de tanto mirar por el microscopio, por suerte era la última lámina que había que clasificar, levanté la mirada y miré a Edward que me miraba divertido mientras tenía la mano recargada en la mejilla.

-la número 27 y última, es tejido epitelial- cogí el bolígrafo y logré escribir "epitelial" en el renglón con el número 27 cuando Edward arrancó prácticamente la hoja de debajo de mi pluma.
Hey!- dije mientras fruncía el ceño.

Edward miraba con terror la hoja

-¿Qué?- pregunté, levantó la vista y clavó sus hermosos ojos ambarinos en los míos.

-Arruinaste el trabajo con tu horrible letra- dijo con fingido horror.

Le quité importancia con un gesto de la mano, y el prácticamente estampó la hoja contra mi cara.

-Mi letra si es un poco fea- admití -pero tienes que aceptar que parte del problema es que escribes con una caligrafía como del siglo XVII es un poco femenina-

-Oye- dijo con simulado resentimiento -El que tu tengas letra de niño de primaria no es mi culpa, apuesto a que escribo mejor que tu con la izquierda-

-no lo creo- si, tal vez lo reté un poco, pero escribir con la zurda era super difícil.

-¿Me estas retando?-

-Tal vez- alcé un poco la ceja izquierda y lo miré con suficiencia.

-ya verás- me tomó de la mano y prácticamente me arrastró hacia el pizarrón donde tomó el gis y lo colocó en la palma de mi mano derecha, lo tomé y escribí lo más bonito que pude en el pizarrón: Bella Swan, le puse el gis en la mano izquierda y me crucé de brazos, me dio una sonrisa arrogante, puso la mano derecha en su espalda para que viera que no hacía trampa y comenzó a escribir, me tapó con su espaldota y aunque intenté espiar, de alguna manera siempre bloqueaba mi vista.

-¿Lista para perder?- me dijo ahogando una risa.

-No- le dije.

Se encogió de hombros, y se apartó, su letra estaba en el pizarrón, su perfecta letra decía un elegante Bella Swan con giros y vueltas estilizadas que le daban un aire de antigüedad a mi nombre, por eso mi nombre completo no me agradaba, era tan viejo mundo.
Entrecerré los ojos

-me hiciste trampa- le dije.

-Yo no hago trampas- me dijo con tono ofendido y aunque sabía que era cierto, me negaba a dejarle ganar.

-Si lo haces- agarré el borrador justo cuando se daba cuenta de mis intenciones, y se lo estampé en la mejilla y en la blusa unas tres veces, dejándolo tapizado de gis -tramposo- le espeté.

Me lo arrebató y lo estampó en mi mejilla, con delicadeza, pero no le fue suficiente, estaba a punto de volverme a empanizar cuando corrí hacia la mesa, comenzamos a jugar, pero el era más rápido que yo (aún no había olvidado lo del incidente, pero a veces me preguntaba si no había sido cosa de mi imaginación, unas veces parecía claro en mi mente y otras creía que me estaba volviendo loca.) Antes de que me alcanzara tomé un vaso de precipitado que estaba sobre la mesa, uno que habíamos ocupado para enjuagar los porta y cubre objetos de los tejidos que habíamos estado clasificando y se lo aventé a la cara.

Por un momento pensé que se me había pasado la mano, pero entonces entrecerró los ojos y me sonrió.

-iu, tienes tejido adiposo, epitelial, nervioso y no se que mas- arrugué la nariz mientras giraba por la mesa.

-Pagarás- dijo y yo pegué la carrera para la salida, logré llegar al pasillo cuando Edward apenas salía del laboratorio, abrí las puertas de un empujón, antes de salir me agarró por la cintura y me levantó sin ningún esfuerzo del suelo y salimos al estacionamiento, intenté zafarme de su agarre pero solo conseguí quedar con las manos apresadas entre su pecho y el mío, estábamos muy cerca y entonces le rayé la frente con un pedazo de gis, me reí y él también, una suave cadencia en su garganta, pero mi risa se atoró en mi garganta cuando vi quien estaba en el estacionamiento, pero mi sonrisa permaneció congelada en mi rostro

Jacob

El agarre de Edward se volvió flojo en mi cintura y me dejó delicadamente en el suelo, lo sentí dar un paso atrás, caminé hacia Jake sin saber que podría estar pasando por su cabeza, yo sabía que no había hecho nada malo, pero también sabía lo mal vista que era esa escena.

Su entrecejo no estaba fruncido, pero respiraba fuertemente por la nariz, sus manos estaban cerradas en puños a ambos lados de su cuerpo que temblaba ligeramente.

-Jake- dije acercándome cautelosamente, puso su mano frente a mi, me detuve, cerró los ojos y respiró profundo unas cuantas veces antes de mirarme de nuevo esta vez pude ver que sus emociones estaban controladas y el ya no temblaba.

-Hola Edward- dijo saludándolo con la mano.

-Hola Jacob- contestó el aludido.

-Tenemos que hablar- me dijo y yo asentí con la cabeza.

-Solo espera a que traiga mis cosas y ordene lo que hemos usado en el laboratorio- asintió con la cabeza y no pude contener el impulso de besarle en los labios y para mi alivio me lo respondió.

Entramos rápidamente y guardé con mucho descuido las cosas en mi bolso, comencé a recoger el microscopio, pero Edward me lo quitó de la mano.

-Yo lo hago-

-Esta bien- no insistí, tomé mi bolso y salí del laboratorio, apenas dandole una mirada de despedida a Edward mientras me hundía en mis pensamientos era cierto que Jacob y yo habíamos tenido nuestras diferencias, problemas normales de pareja, pero nunca lo había visto tan alterado como hoy.

Cuando salí, ya estaba esperándome, sentado en la moto, tomé el casco y monté detrás de él, enlazando mis manos en su cintura y noté como su corazón latía fuertemente bajo mis manos.

Llegamos a mi casa, mi corazón latiendo rápidamente porque aunque yo sabía que no había hecho nada, tenía miedo, miedo de perderlo por algo tan estúpido.

Bajé de la motocicleta, esperé a que bajara pero no lo hizo.

-¿No vas a acompañarme dentro para que podamos hablar?- apreté los labios intentando disimular el sollozo que luchaba por salir de mis labios.

-No-

-¿Entonces?- mi ceño se arrugó un poco.

-No vamos a hablar Bella- mis ojos se llenaron de lágrimas, parpadeé rápidamente intentando despejarlas, pero no dio resultado, así que las eliminé antes de que corrieran por mis mejillas con el dorso de mi mano.

No dijo nada más y arrancó la moto perdiéndose en la carretera.

**********

Comenten!!! Las amoo!! Auuu me encanta este Edward a ustedes no?? Es mas sensible y mas divertido... y eso que no soy team edward!!

miércoles, 22 de septiembre de 2010

Capítulo 19: Sr. Vanidoso

Muy bien aqui les dejo este capi que acaba de venir a mi mente, recién salido del horno de locuras que es mi mente, espero que les guste, va dedicado a Laudia Tovar, TatikCullen (ya vote por tu fic!!)Lap y un lindo anónimo que son las que comentaron el capi pasado, Anónimo, porfa deja tu nombre para saber a quien le debo los comentarios que como siempre son mi inspiración... bien chicas disfruten el capi.


El coche paro despacio, apagando el motor que era tan suave que no hizo la menor diferencia en el ruido en la calle, no me moví, había preguntas que quería hacer, me quedé mirando el parabrisas y el leve rastro de niebla que había en la lejanía, así era como me sentía justo ahora, con respecto a mi vida, llena de incertidumbre acerca de mi futuro, estaba confundida acerca de mis sentimientos; mis emociones eran tan confusas que no sabía que era realmente lo que sentía, estaba revuelta acerca de todo.

Tragué el grueso nudo que se había formado en mi garganta y apenas en un susurro dije:

-Gracias por traerme- miré a el conductor del auto, su mirada al frente mientras tragaba en grueso, estaba tenso, sabía que el traerme suponía un reto para él, sobre todo después de todo lo que había pasado entre nosotros, pero después de todo, necesitaba que él me trajera y aún no sabía la razón.

Agarré la manija, esperando que llegara a mí la fuerza para jalar la manija y salir del auto, pero perdí el impulso; tenía una pregunta, una pregunta luchando por salir de mi boca, pero no sabía como plantearla o mejor dicho sí lo sabía, pero no tenía el valor, ni para salir, ni para preguntar, cerré mis ojos, en un debate mental, hacer esta pregunta significaba obtener una respuesta, evitaría muchos problemas y muchas noches en vela, o al menos eso era lo que esperaba, pero simplemente mis cuerdas vocales no lograban ponerse en funcionamiento, intenté bajar el bloqueo de mi garganta, tragar el grueso nudo, respiré profundo y sin mirarlo siquiera, lo solté antes de que mi valor se evaporara.

-¿Puedo preguntarte algo?- oh que estúpida, tomaba impulso y lo tomaba para hacer una pregunta estúpida, hasta en su formulación gramatical; ahora que iba a pasar si me decía que no.

-Claro Bella- me dijo con la voz tensa, pero firme, lo admiraba, admiraba su capacidad para dominar sus emociones, yo estaba al borde de la histeria y me costaba controlarme. Me giré en el asiento, mirándolo a los ojos, giró su rostro hacia mí y pude admirar sus facciones, una aristocrática nariz, mentón firme, una hermosas y masculinas cejas arriba de un par de hermosos y expresivos ojos del color del caramelo fundido, a los que contadas ocasiones había visto mas alegres que ahora, su suave cabello rubio, suelto hasta el mentón, Jasper era un hombre muy atractivo y podía ver porque Alice estaba tan enamorada de él, aunque nuestra relación nunca había sido la mejor, ahora había aceptado traerme a casa, dudó, supongo que debido al ultimo incidente que tuvimos y aunque sabía que era arriesgado, el hecho de que hubiera aceptado era algo que le agradecía, no me apetecía estar con nadie mas de la familia Cullen, quería pensar, aclarar mis sentimientos y sabía que Jasper podía ayudarme.

-Jasper, ¿Qué es lo que estoy sintiendo?- era una pregunta que me había hecho a mi misma durante la ultima media hora y no sabía la respuesta, realmente esperaba que pudiera ayudarme a resolverla; sonrió, una genuina y leve sonrisa, podía contar con los dedos de las manos las veces que lo había visto sonreir, tenía una linda sonrisa y unos hoyuelos se formaban en sus mejillas, además de que su semblante se volvía mas sereno y relajado y no el de concentración que usualmente tenía cuando yo estaba.

-Sabía que ibas a preguntarme eso- sacudió la cabeza de lado a lado, agitando el cabello suavemente, soltó el volante y se giró un poco en el asiento para poder verme mejor. -Esa es una pregunta que deberías plantearte y resolver tu misma- mordí mi labio e hice una mueca.

-Pensé que podrías ayudarme- crucé mis manos en mi regazo, las descrucé y apretuje mis dedos, para repetir la operación infinitamente, estaba nerviosa.

-Si puedo, pero es todo lo que puedo hacer, ayudar, no puedo darte la respuesta a todo, puedo decirte que sentimientos tienes, pero te corresponde a ti dar con el origen de ese sentimiento-
asentí lentamente. -Muy bien Bella, quiero que respires profundo, deja que tus emociones fluyan- cerré los ojos y llenando mis pulmones de aire, sintiendo como se regodeaban de aire; deje fluir todo, mis emociones estaban tan mezcladas que no sabía que era lo que estaba sintiendo. - Siento, tu miedo, tristeza y cólera principalmente- fruncí el entrecejo, no me había ayudado en nada, aunque lo agradecía.

-gracias Jasper, no sabes como te lo agradezco, se lo difícil que es para ti estar cerca de mí, lo valoro mucho- jalé la manija del auto, el aire frío y fresco entró en el auto, estaba por salir cuando algo increíble pasó, su mano cogió mi muñeca, suave pero firme, y me mantuvo dentro del auto, no me asusté, su toque era delicado, nada agresivo, me giré y lo miré.

-Quiero ayudarte Bella-

-ya lo hiciste- le dije, mientras ponía mi mano libre sobre la suya y la apretaba ligeramente.

-No; puedo ayudarte, más, se que puedo, solo debo pensar bien en el modo, déjame pensarlo- sonrió un poco, de nuevo.

-¿De verdad?- sentí mi voz entrecortarse, pero de verdad significaba mucho para mí.

-Claro Bella, te lo debo, quiero ayudarte, me siento culpable por lo que pasó- bajó la mirada, pero no soltó mi brazo solo hizo el agarre mas leve-

-No Jasper eso no es verdad- le dije sacudiendo su mano, o al menos lo intenté.

-no no, Bella, déjame continuar, es algo que tengo que decirte, que decirle a alguien- me callé, sabía mejor que nadie que había veces que hablar de las cosas, era la mejor medicina para los males del corazón, lo había experimentado en carne propia -Si no hubiera sido por mi falta de control, tal vez esto no habría pasado, tu seguirías con Edward, tal vez incluso dentro de poco te hubieras convertido en un miembro activo y permanente de el clan Cullen- me miró e hizo una mueca, una de esas que hacía cuando intentaba sonreír estando triste. -Pero no vamos a poder saberlo nunca, la regué, por mi culpa nos fuimos, yo fui el causante de la inseguridad de Edward acerca de tu seguridad, directamente soy el causante de todo el dolor por el que pasaron Edward y tú, antes y ahora, si hay alguna manera de enmendarlo, al menos contigo es ahora, es algo que quiero y debo hacer; déjame ayudarte- me miró y vi mucha culpabilidad en esa mirada, yo sabía que eso no había sido su culpa.

-Acepto tu ayuda Jasper- me regaló otra sonrisa, de las genuinas, se la devolví -Solo quiero aclarar algo, se que la culpa es un sentimiento irracional- iba a protestar, pero lo callé con una mirada tipo Alice- lo que pasó ese día, fue simplemente la gota que derramó el vaso, nuestra relación estaba segmentada, desequilibrada, Edward lo sabía y en algún momento algo hubiera pasado que cambiaría su opinión, algo que lo haría tomar la decisión que tomó, si no eras tu, habría sido Victoria, algún otro incidente - suspiré - o tal vez yo misma con el tiempo, nuestras diferencias sobre nuestra vida juntos, eran muchas, tal vez tendrían una solución, tal vez no, no soy vidente, pero una vez alguien me dijo que el futuro no esta escrito en piedra y es verdadero; ahora no se que hacer me siento dividida y un poco perdida entre tantos sentimientos que me están ahogando, pero quiero que me ayudes porque tienes la convicción y el deseo, no porque te sientes culpable y en deuda conmigo, porque no lo estás- sacudí la cabeza y palmeé su brazo - No lo estas-

-Gracias Bella- otra sonrisa, sacudí la cabeza, restandole importancia y negando las gracias, no me las debía, era la verdad. -Deseo ayudarte Bella- sonreí.

-Gracias Jasper-

-Te veo mañana, dame el día de hoy para pensar-

-toma el tiempo que necesites, sabes donde encontrarme, solo no sigas los malos ejemplos de Edward, toca a la puerta- sonreí y salí del auto, para asomarme -Por cierto Jasper, te ves muy bien cuando sonríes-

-Ya me lo han dicho- me guiñó un ojo y yo rodé los míos -mañana-

-Hasta mañana Sr. Vanidoso- cerré la puerta y no se fue hasta que entré en casa, Charlie roncaba en su habitación ignorante de que su hija había sido secuestrada durante la noche, buen sheriff que teníamos en Forks eh.

Me acosté, pensando en todo lo que había pasado en el último par de horas, la confesión de Edward me tenía con la cabeza hecha bolas y su beso me había movido todo, no sabía que hacer, pero al menos algo bueno había resultado de esta noche, había descubierto a un Jasper que no conocía, uno que me agradaba, uno sensible, mas humano de aquella estatua a la que estaba tan acostumbrada, nunca había imaginado que se sentiría de ese modo y nunca había pensado que pudiéramos llevarnos mejor, al parecer me había equivocado; ¿Qué seguía ahora? ¿Volverme la mejor amiga de Rosalie? hasta yo me reí de ese pensamiento aunque luego me arrepentí, mi vida había dado tantas sorpresas y lecciones desde hacía dos años que ahora no sabía que pensar.

Mañana veríamos si el metodo de Jasper servía. Esperaba que lo hicera.

***************

Que tal el capi, se lo esperaban? juju a que no... ay esq he aprendido a tenerle amor a Jasper, es un poco por culpa de Patry que me ha inculcado su amor a este personaje y decidí darle un poco mas de importancia, creo que tiene mucho que explotar y que aportar a esta historia... en fin que les ha parecido? Me merezco comentarios? las amoo nos vemos mañana con Tentaciones bajo el crepúsculo de mi querida Patry... besos!!

lunes, 20 de septiembre de 2010

05. Sorpresa

mis ángeles aquí esta el capi que ahora me ha costado mucho trabajo porque lo he escrito al 100% mi ipod xq mi compu esta descompuesta perdonenme si ha errores de dedo porque ya saben lodoficil que es escribir en el ipod más con el condenado corrector de palabras que no sirve para nada! pero aún así aquí lo tienen porque ya he sido suficienemente impuntual! Las amoo! Disfrutenlo!




••••••
Uf que incómodo se esaba volviendo este silencio, mientras todos nuestros companeros platicaban entre ellos, Edward y yo realizabamos la actividad de laboratorio en completo silencio, rapidamene, sin dirigirnos ninguna palabra más que las necesarias para realizar el trabajo; había intentado platicar con él pero tal parecía, que todos mis intentos eran en vano, por más que lo intentaba Edward estaba monosilábico hoy, si y no era la única respuesta que había obtenido durante la última hora.

En fin, no sabía que era lo que le pasaba, pero no tenía la intencion de estar de nana, suficiente con haberle preguntado ya un par de veces, si no me quería decir, pues supongo que sus razones tendrá.

-Bella?- pregunto tan de repente y tan bajo que no estaba segura si había escuchado bien, moví la cabeza, si me había hablado la interpretaria como una invitación a que continuara y sino sería un simple movimiento.

- ¿tú y tu novio van muy enserio verdad?- su pregunta me sorprendió, porque después de lo que había escuchado por error, evitaba ese tema porque lo consideraba peligroso y el tampoco lo tocaba, por eso la pregunta me tomó desprevenida.

-Si vamos muy enserio- contesté encogiendome de hombros, restandole importancia en mi intento porque cambiara de rumbo nuestra conversacion hacia algo más neutral; aunque si lo pensaba bien, éste podía ser un buen momento para aclarar el punto, aprovechando que él había sacado el tema, así no se vería tan obvio.

-¿lo amas?- preguntó, no me miró cuando lo hizo, miraba hacia su cuaderno de apuntes en donde garabateaba sin sentido, si él había preguntado es porque quería saber la respuesta, esperaba que aceptara la verdad aún cuando no le gustará demasiado mi respuesta.

-Sí lo amo- dije mirandolo directamente aunque el no me mirara a mí.

-¿Eres feliz?- preguntó y esta vez si me miró a los ojos.

-¿Porque estaría a su lado sino?- le dije en un tono un poco condecendiente.

-No lo sé, el corazón escucha razones que la razón no comprende, he visto a muchas personas estar a lado de la persona que aman, soportando tormentos e humillaciones, bajo la simple y poderosa razón del amor.- sacudió la cabeza - Aún no lo comprendo pero al parecer a algunas personas les gusta el masoquismo y solo quería asegurarme que no es tu caso.

-No lo es, soy felíz, mucho- desvié mi mirada a la mesa mientras sonreía, si era feliz, era muy feliz, tal vez no era la chica más afortunada del mundo como cualquier mujer enamorada dice en las películas, Jake tenía sus defectos y yo los míos, teníamos nuestras diferencias, pero siempre las superabamos juntos, nuestras diferencias nos unian más aún que separarnos y eran esas mismas diferencias las que nos enseñaban mucho. Tal vez no era la mujer más afortunada del mundo, no realmente pero me sentía como la mas afortunada y para mi eso era lo que
contaba.

-Eso es todo lo que necesitaba saber- asintió con la cabeza y volvimos al mecánico trabajo de no hablar y solo hacer el trabajo de laboratorio, que aunque no había sido muy larga habíamos perdido mucho tiempo en la plática, el trabajo era mucho y aunque íbamos adelantados queríamos salir a tiempo y no llevarnos trabajo a casa. Resultó que aunque nos apresuramos no nos alcanzo el tiempo tendríamos que quedarnos otro día hasta tarde, no podía ser hoy puesto que Edward tenía entrenamiento en el equipo de béisbol, y yo ... Yo tenía una cita.

Nos despedimos y fui a mi locker a guardar mis cosas, para después correr al estacionamiento hacia mi camioneta, donde me encontré a Jake platicando con Mike, me pase de largo; Jake se me quedó mirando extrañado aventé mis cosas a la batea de la camioneta y lo mire seria, Mike decidió que hacia mal tercio y lo peor de todo era que al parecer yo estaba molesta por algo, Jacob se acercó cautelosamente mirandome inseguro sobre mi manea de actuar su cara me conmovio tanto que tuve que morderme la mejilla para no reír y hechar a perder mi maravillosa actuación.

-¿Estás bien amor?- me preguntó, no respondí hasta que estuvo lo bastante cerca
de mi y me avente sobre el para rodear su cintura con mis piernas y su cuello con mis brazos y plantarle un beso casto en la boca, no fueran a llamar a mi padre para arrestar a su hija y a el hijo de su mejor amigo por comportamiento indecente. No era una imagen agradable.

-te engañe- dije

-me asustaste- me dijo mientras besaba mi nariz y me bajaba al suelo.

Su moto estaba junto a la camioneta. Hice un mohín, no me gustaba la idea de que nos fuéramos separados y se lo dije.

-eso tiene una fácil solución- me dijo mientras abría la batea de la camioneta y levantaba aparentemente sin mayor esfuerzo la moto y la ponía arriba, cerro la batea sin una sola gota de sudor en su frente y me quede muda, sabía lo mucho que pesaba una moto como la de Jake pues yo misma era dueña de una idéntica a esta en color rojo y pesaban como el infierno, la fuerza de una mujer era menos que la de un hombre, pero siempre nos había costado un poco de trabajo moverlas cuando el motor no estaba encendido.

- ¿Estas bién?- pregunté

-Si esto, he estado ejercitandome, no quería que tuvieras un novio enclenque, quería que fuera una sorpresa pero... Ya qué-

-Fue una sorpresa créeme-

Me regaló una hermosa sonrisa que no pude evitar devolverle, trepamos al gran rojo y salimos rumbo a mi casa a pasar una tarde como las de antes...

•••••••
Era tarde por la noche, me acababa de salir de bañar, mamá estaba dandose un baño zen (su nuevo pasatiempo) que consistia simplemente en estar bajo la regadera con agua fría en meditación, las modas de mi mamá iban y venían según su humor y la época del año, papá tenía una emergencia de trabajo y llegaría tarde; entré en mi habitación con la toalla enrredada bajo los brazos y el conocido turbante para secarme el cabello, prendí la luz y ahí estaba Jacob, sentado en mi cama sobre mi edredón púrpura, solté un pequeño gritito porque me sorprendí al verlo aquí, viendose tan sexy y atractivo como siempre ( que podía decir... Era mi novio tal vez este siendo un poco parcial) rápidamente me quite el turbante de mi cabeza dejando caer mi cabello húmedo sobre mis hombros, el turbante en la cabeza no es nada sexy

-hola- susurré, sabía que mi madre estaba en la otra habitación y eso me ponía un poco nerviosa, mis padres respetaban nuestra privacidad y Jake había estado innumerables ocasiones en mi cuarto, pero ninguna de ellas me incluía desnuda cubierta solo por una toalla, a ambos padres les daría un infarto si me vieran ahora -¿qué haces aquí?-

Se acercó suavemente hacia mí, sigiloso como un animal acechando a su presa.

-Llegaba a casa cuando tuve la imperiosa necesidad de venir a vete- acarició mi hombro ligeramente, causando que miles de mariposas revolotesran suavemente por mi columna vertebral -cierra los ojos- me susurró al oído mientras pasaba un dedo por el puente de mi naríz, obedecí instantáneamente y lo sentí moverse a mi alrededor, sus labios lamieron mi piel ahí donde una gota se escurría directo hacia mis pechos y un suave gemido se escapó de mis labios, era muy erótico, mi corazón golpeaba fuertemente a mis costillas, primero debido a la emoción de el momento y segundo estaba un poco asustada de que mi madre nos encontrara y auque técnicamente no estabamos haciendo nada indebido, mis padres no iban a tomarse una escena así muy a la ligera.

-tengo algo para ti- susurro a mi oído mientras mi piel se erizaba por el roce de su aliento.

Deslizo algo en mi cuello; me tomo por los hombros y caminamos por la habitación.

-Abrelos-

En mi cuello una delicada cadena caía hasta el nacimiento de mis senos, donde descanzaba la figura de un pequeño lobo de madera perfectamente tallado.

Me giré para encontrarme con la acojedora mirada de Jake

-¿tu lo hicise?- asintió mientras rozaba con sus dedos el dije. -es hermoso Jake gracias- lo abracé por el cuello y lo bese fieramente sus manos envolvieron mi cintura, su lengua acariciando la mía y sus labios cobijando los míos, mientras nuestras respiraciones se mezclaban y nuestro aliento se fundía en uno solo, cuando nos separamos mi toalla callo dejando al recubierto mis senos, la mirada de Jake vago por la parte expuesta de mi cuerpo, mientras sentía mejillas ruborizarse y mi cuerpo calentarse, mis pezones se irguieron esperando atención y vi a Jacob tragar gordo antes de tomar la toalla y subirla por mis costados, pero accidentalmente rozó uno de mis pezones y yo gemí sin poderme contener, mordí mi labio y Jake se inclino para tomarlo con su boca, sus manos subieron por mi espalda, causando que la toalla callera por completo, no sentí verguenza, estaba ahí con mi novio, lo que era extraño era estar completamente desnuda, mientras el permanecía completamente vestido, pero perdí el hilo de mis pensamientos cuando tomó mi pezón entré sus labios, lo mordisqueó, lo pellizco y jaló un poco para después repetir la tortura con mi otro seno, su mano bajó por mi espalda, para encontrar mi entrepierna, que ya estaba humeda y palpitante, comenzó a dar leves toques, para después hacer circulos en mi carne y comenzar a masajear mi clítoris con un ritmo que me volvía loca, me controlaba para no gemir demasiado alto pero me era imposible.

- Tengo que irme antes de que sea muy tarde Bella, ya no hagas eso o no podré marchar- aun´que no quería que se fuera, dejé de morder mi labio sabiendo lo mucho que lo provocaba, me cubrí al ver la mirada de Jake, sabía que este no era el momento, ni el lugar, como si pudiera leer mi mente dijo - no es el momento- me beso casta y rapidamente antes de desaparecer por la ventana.

Dormí con una sonrisa en el rostro sin saber que el día que me esperaba mañana sería realmente tormentoso.

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bueno espero les haya gustado, después de horas enteras peleandome con. Mi ipod en cuanto mi compu este arreglada subiré la imagen y arreglaré los errores ortograficos que pueda tner! Me costó mucho hacer este capi así que espero comentarios. Espero les hya gustado el pequeño lemmin x final pequeño pero me encanto! Las amoo nos vemos l miercoles buajaja

sábado, 18 de septiembre de 2010

Capítulo 18: Despejando las dudas

Ya ya tengo la costumbre de subir capi tarde lo saben! Pero bueno aqui se los dejo!! Disfrutenloo


Me revolví en la cama, patalee intentando librarme de la mano que me tenía presa, no sabía que hacer, lancé golpes a diestra y siniestra, intenté gritar, pelliscar, morder y nada funcionó, mis pulmones comenzaron a gritar por aire, hasta que sentí que me comenzaba a ahogar y entonces todo se obscureció.

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La cabeza me pesaba, los pulmones me ardían y mis ojos se negaban a abrirse, estaba confundida, me llevé las manos a la cabeza, apretando un poco para intentar calmar el dolor de cabeza que palpitaba en mis sienes; respiré profundo, los pulmones ardiendo y agradeciendo el hermoso oxigeno que entraba en ellos, una, dos, tres veces y me concentré en abrir los ojos.

El techo blanco de mi habitación estaba frente a mí, un suspiro salió de mi pecho cuando me di cuenta de que todo había sido una pesadilla, el alivio me inundó, llenando mis pulmones que de nuevo ardieron, escuché sonido abajo, la televisión encendida.

-Ah cabrón- se escuchó una voz grave, una que conocía demasiado bien, una que se había burlado demasiado de mi torpeza durante un año, que me hacía reir con sus bromas, pero no podía ser posible, debía estar soñando -No me ganaras hijo de perra- nadie mas tenía ese timbre grave rasposo en la voz y al mismo tiempo sexy, era la voz de Emmet, lo sabía.

Me incorporé de un salto en la cama, y vi donde me encontraba, paredes blancas, con un purpura profundo combinado en ellas, una enorme cama, donde no debía de haber camas, me quité los cobertores de encima y mire alrededor, no podía creerlo, ¡maldita sea! ¿Que carajos hacía yo en la casa de los Cullen?

Salí de la habitación intentando ser lo mas silenciosa posible, al otro lado del pasillo estaba la recamara de Edward, sabía que era ridículo de mi parte caminar sobre las puntas de mis pies, puesto que ellos podían escucharme y sabían que estaba despierta desde el simple cambio de respiración y en la manera en la que mi corazón latía frenéticamente en mi pecho, y el aire salía rapidamente de mis pulmones, bajé las escaleras, el piano de Edward oportunamente frente a mí, recordandome hermosos y dolorosos recuerdos, toda la casa estaba llena de historias con Edward, Alice, Emmet y algunos incidentes con Jasper y Rosalie, pero todos ellos me hicieron sonreír ahora, aunque no niego que hubo un par de ellos que me dolieron, Edward significaba algo grande en mi vida, lo quiciera o no, era la verdad y era algo que no podía cambiar y por otro lado no estaba segura sobre si quería hacerlo o no.

Era un gran recuerdo y estaba conciente de que era algo que debía enfrentar tarde o temprano, pero cobardemente quería que fuera tarde, aunque no tenía ni la menor idea de como iba a hacerle para salir de aquí, la casa de los Cullen estaba en la mitad de la nada, obviamente no traía mi celular, pero ahora primero tenía que salir de aquí, asomé la cabeza a la sala, donde estaban Emmet y Jasper peleandose por ganar una carrera en el X-box, tal vez no me escucharían, ja que estúpida, mas tarde en pensarlo que Emmet en decir:

-Nuestra prisionera se escapa- en tono infantíl, aunque sabía que era en vano, corrí, no llegué a ningún lado fui interceptada por Alice a quien fulminé con la mirada.

-¿Como pudiste raptarme?- le grité.

-Era necesario Bella, necesitamos hablar-

-¿Necesario?- dije en un tono un poco condecendiente -Darme un susto de muerte, casí matarme por falta de oxigenación en la sangre, dejarme inconciente y raptarme, es algo que suena completamente lógico si quieres hablar conmigo- la ironía se notó en mi voz -Ahora mismo Alice no eres mi persona favorita, quiero ir a casa-

-Lo siento Bella, se que se me paso la mano- se miró las manos, bajando la mirada, al menos se veía apenada -Es solo que no sabía si ibas a querer hablar conmigo después de lo que pasó... sabes- me miró, mientras se abrazaba a si misma y me veía con cara de perrito triste y aunque sabía que lo que quería era manìpularme como lo hacía con todas las personas y sabía que Jasper estaba en la sala, estaba segura de que el impulso de abrazarla fue nacido de mi alma, nada de control emocional, Alice era mi amiga y estaba segura de que estaba arrepentida por haberme secuestrado, con respecto a lo de Jacob no estaba segura pero al menos por ahora no pensaría en ello. -No eres prisionera Bella-

-Lo sé Alice- la miré y le sonreí intentando aligerar la situación.

-Vaya, escapar sin zapatos es un brillante plan- soltó Emmet a mi espalda, burlandose de mí, me giré, su risa infantil en su rostro -Sigues siendo torpe-

-Y tu tonto- dije mientras le sonreía y lo abrazaba

-Hey 100 años merecen tu respeto ¿no?- alborotó mi cabello.

-Claro, ya eres de la tercera edad- le dije mientras me reía.

-Pues que bien me concerbo- flexionó sus biceps, como siempre su lado metrosexual.

-Gay- dije mientras me sentaba en la sala a ver como Emmet y Jasper se peleaban por un trofeo que no existía mas que en la consola.

-¡Alice!- gritó Edward desde la entrada, al segundo estaba entrando en la sala, mirando con furia a Alice -¿Que hiciste?- gritó, fue entonces que se dió cuenta quien estaba junto a ella y cuando me miró sus ojos se suavizaron, solo un poco, pero los suficiente para que yo pudiera notarlo, para que recordara al Edward del cual me había enamorado cuando llegué a Forks.-Bella- susurró y su voz tembló solo un poco.

-Hola Edward- dije y creo que mi voz también tembló un poco.

-Edward, sabes que es necesario- agg de nuevo otra de sus conversaciones telepaticas, odiaba eso, al parecer se dieron cuenta de ello y Alice decidió explicarme. -Ustedes dos tienen que hablar-

-Hablaremos- asentí y Edward me miró mitad asombrado, mitad aliviado. -Pero quiero aclarar tres cosas- levanté los dedos para que quedara claro mi punto- Uno: No estoy aquí porque lo haya querido, fui raptada y quiero regresar a mi casa- miré a Alice quien asintió, -Dos: Quiero hablar contigo Edward y Numero Tres y mas importante: Nada de magia Japer- lo miré y asintió lentamente, no muy convencido, pero cuando miré a Edward el asintió, a pesar de todo, confiaba en él. -Andando- dije mientras subía las escaleras, me giré cuando ví que no me seguía -¿No vienes?- le pregunté asintió lentamente mientras subía las escaleras entramos a su habitación, me senté en el conocido sillón negro, mientras Edward cerraba la puerta a su espalda.

Se quedó parado, se le veía incomodo, así que palmee el sillón a mi lado y algo indeciso se sentó a mi lado, me voltee para poder verlo de frente y solo lo miré.

*****

Estaba tan hermosa, mirandome, su cabello deliciosamente revuelto callendo en cascada sobre sus hombros, sus suaves y dulces ojos, su mirada perforando la mía, su cremosa y delicada piel captando tenuemente el brillo de la lampara y la luna, mientras sus labios se abrían para decir algo, algo que no escuche, porque quedé embobado mirando la manera en que se movía su boca.

-¿Edward?- preguntó al ver que no contesté, pero su mirada me había hecho olvidar que era lo que tenía que decir, las palabras se revolvieron unas con otras, mi cerebro se fundió y comencé a balbucear como un estúpido.

-Bella... yo.. ehh.. hay tantas cosas... quiero aclarar...-

-Calma Edward, tenemos tiempo- tomó mi mano, mas en un gesto para intentar calmarme que en un gesto que significara afecto, pero el calor de su mano se propagó por mi cuerpo, absorbiendolo, las sensaciones despertando en mi muerto y frío corazón, esas sensaciones que solo Bella había logrado despertar después de 200 años y que yo estúpidamente había tirado a la basura, pero ese gesto no solo significo algo para mí, también lo fue para ella, lo supe por la manera en la que su mirada cobró un brillo diferente, un brillo que conocía, aquella ves que habíamos estado en el laboratorio del señor Banner mirando peliculas, me había mirado de la misma manera y aunque sabía que no me lo merecía, una pequeña esperanza se abrio paso, pequeña pero ahi estaba.

-Yo.. primero me gustaría pedirte perdon por el daño que te causé- toqué sus brazos levemente.

-Se que no lo hiciste a propósito, solo no mides tu fuerza-me dijo mientras se encogía de hombros, pero mi disculpa no era solo en lo físico, sino en todas las heridas y el dolor que le había causado y como siempre Bella era demasiado noble o ingenua para darse cuenta de el significado de mis palabras.

-Bella, me refiero a mas que eso, a el dolor que te causé con todo lo que hice... cuando me marché- sus ojos se obscurecieron, mientras su respiración se aceleraba, retiró su mano de las mías y me sentí frio de nuevo.

-Eso ya no tiene caso- desvió la mirada, mientras parpadeaba rapidamente intentando que yo no viera las lagrimas que le causaba, pero era demasiado tarde, podía oler el salitre en sus ojos, su dolor y desee poder golpearme ahora mismo por lo estúpido que había sido.

-yo... solo quiero que comprendas algo, no me fuí porque no te amara, o porque no deseara estar contigo, me fuí porque eres humana- alzó la mirada y aunque aún había restos de lagrimas, su semblante era sombrío y su entrecejo estaba fruncido.

-A que te refieres-

-Me refiero a que me fuí, para protegerte, porque te amaba demasiado como para perderte, tu eres humana y esa es una parte de ti, una que amo demasiado como para ponerla en peligro, creí que si me iba estarías a salvo, que con el tiempo me olvidarías y seguirías con tu vida -la miré, esa parte de mi suposición era tan verdadera, ella me había dejado atrás, me había olvidado y ahora estaba con ese licántropo, sentí la ponzoña llenar mi boca, pero me controlé y seguí hablando, antes de perder el coraje - pero no me dí cuenta de que... no podía vivir sin tí - me miraba sin mirarme, sus ojos abiertos -estuve viviendo como un zombie durante meses, me alejé de mi familia, preocupando a mis padres, hasta que decidí que no podía estar sin verte, decidí regresar, ver como estabas, de lejos, sin interferir en tu vida a menos que estuvieras en peligro... o que dieras señal de querer verme o hablar conmigo, de verdad que no tenía la intenciónde aparecerme, pensé que estabas a salvo sin mí, pero me equivoqué y luego todos los problemas comenzaron -Victoria, el altercado con su novio y ahora el problema con la manada -pero la realidad de todo esto es que volví porque te amo demasiado y no puedo vivir sin tí- su mirada estaba perdida, tomé su mano, pareció reaccionar a mi contacto y me miró mientras sus ojos se llenaban de lágrimas, se levantó y se paró frente a mí.

-Edward...- apretó los labios mientras intentaba contener las lágrimas y de nuevo me golpee a mi mismo por tener tan poco tacto -yo.. bueno... estuve como muerta cuando te fuiste- su voz era rasposa y temblorosa - el perderte, significo no solo el fin de una relación, fue la perdida de toda la vida que había escogido- la vida como inmortal, una vida que yo no quería para ella -me sentí vacía perdida, no salí de casa por más de 6 meses mas que para ir a la escuela, comía solo para no enfermar y que Charlie tuviera una escusa para mandarme de regreso a casa, porque aquí era donde me gustaba estar, porque tus recuerdos estaban aquí... oh dios que patética sueno- no sonaba patética, era precisamente lo que yo esperaba escuchar, pero me dolía saber que había sufrido tanto por mi culpa -dormía pero solo para tener pesadillas, Victoria era la protagonista de algunos, otros eras tú...- una lágrima bajó por su mejilla, pero ella la quitó rapidamente - y entonces apareció Jake y comencé a salir y a sentirme mejor, comenzamos a andar en moto y otras actividaddes peligrosas -apreté la mandíbula, no queriendo imaginar a mi fragil Bella en una moto y todas las cosas que podían sucederle -e ironicamente todo eso fue por tí...- sonrió mientras sacudía la cabeza - porque descubrí que el peligro me hacia recordarte con mas claridas, escuchaba tu voz en mi cabeza... y luego jake y yo tuvimos algunos problemas, pero los solucionamos y ahora estamos juntos, en muchas maneras es diferente a la relacion que tenía contigo, soy 100% parte de su vida, no me deja fuera y me siento entera cuando estoy con él, segura, y ahora vienes y me dices todo eso y haces que me confunda... - comenzó a jalarse el cabello, como si estuviera muy distraida para darse cuenta de lo que hacía -yo... todo este tiempo pensé... que me habías dejado porque no me amabas, porque era muy poca cosa para tí- me levanté y tomé su rostro entre mis manos, su corazón comenzó a latir mas aprisa y su respiración se aceleró intentó escaparse pero no la dejé yo ya había identificado esos signos, me había dicho las palabras que solo en mis pensamientos mas remotos había fantaseado con escuchar de sus labios, la sentía segura y mas cerca de mí que nunca antes.

Puse mi frente en la suya, recargandola con suavidad, mientras cerraba los ojos e incpiraba su aroma, su dulce olor a fresa y escuchaba el hermoso canto de su corazón

-Yo te amo Bella- dije, mientras unía mis labios con los suyos.

*************

Bua ja ja!! Me he inspirado mucho en este capi que aunque he subido tarde ha valido la pena digo yo! jaja no me odien el miercoles llega pronto!! Las amoo angeles dejenme sus comentarios aunque sea para regañarmee!!!

jueves, 16 de septiembre de 2010

capítulo 3: Paul


¡AVISO IMPORTANTE LEER ANTES DEL CAPITULO!

Los personajes son de S.M, la historia es mía y de mi querida amiga Marina…
La historia contiene vocabulario adulto, sexo explicito, dominación, violaciones…
Ósea que si eres de mente sensible o no te gustan estos temas, no leas la historia, ya que después no queremos quejas de que quedaron traumatizadas…
Queda dicho, asique a DISFRUTAR DEL CAPI
Un beso de sus amigas Patry y Marina

CAPITULO 3: PAUL
Mientras que los dos vampiros tiraban en cuerpo de la muchacha en el acantilado y emprendían el camino hacia la casa de la humana que había cautivado al frio Edward Cullen…
La inocente bella en esos momentos, se metía en la ducha caliente, intentando relajar los músculos de su cuerpo, Estaba cansada, pero ese cansancio no era físico, Sino mental. Había pasado todo el día dándole vueltas a la cabeza.
Había quedado con Paul para verse en la tarde, Ya que había tenido mucho trabajo en el taller esa semana, Y no habían podido verse. Muchas veces sentía que era culpa de ella, que quizás no le daba lo suficiente a Paul, el se lo había dicho muchas veces, pero la verdad es que aunque lo amara, una parte de ella le tenía miedo, mucho miedo. Odiaba sus cambios de humor constantes, no entendía como podía tratarla tan bien delante de la gente, y después a solas, tratarla como si fuera su muñeca, no era la primera vez que le pegaba, que la insultaba, incluso a llegado a tener sexo con ella contra su voluntad.
Ella había intentado dejarlo, pero el la había amenazado con hacer daño a su familia, y ella sabía que aunque su padre fuera el jefe de policía, no tenía nada que hacer contra un licántropo enfadado, a veces, no sabía cómo podía amarlo de esa manera, pero aunque en algunas ocasiones se comportaba como un animal dominante con ella, otras era tierno, cariñoso, amable, simpático… todo lo que ella amaba en el… pero esa tarde se dio cuenta que cada vez menos veces esa parte del salía al exterior…
Ya que a última hora, esa tarde, había recibido una llamada de el cancelando sus planes, de pasar toda la tarde juntos, En la playa de la Push.
"flashback"
Estaba metida en mi mundo de ensueño, contenta, ya que hoy por fin podría ver a mi Paul, aunque una parte de mi esperaba, que realmente fuera mi Paul, ya que la última vez que lo vi, el Paul que apareció, no fue el que yo realmente amo.
Últimamente estaba muy ocupado con su taller –si el es mecánico en la Push, tiene su propio taller- y apenas nos podíamos ver o hablar. Lo entiendo son muchas responsabilidades, pero había algo que no me acababa de hacer a la idea.
Últimamente lo encontraba más raro de lo habitual, pero de seguro eran mis paranoias e inseguridades, Siempre me pasa lo mismo y luego él se en fada con migo y es peor.
Estaba tan metida en mis pensamientos, mientras fregaba los platos sucios, que pegue un bote que casi me agarro al techo, cuando oí el sonoro ruido del teléfono.
Me apresuré a contestar, sabiendo que lo más seguro, seria mi Paul diciendo que ya salía hacia aquí para verme.
- Diga? - dije con la respiración un pelín acelerada, por la carrera que me metí de la cocina al salón, intentando no tropezar con el aire.
-hola nena, que te pasa te noto acalorada, es por mi cierto???-contesto Paul con voz picara…
- Ay Paul, que cosas dices, siempre haces que me ponga colorada - me sonroje furiosamente - simplemente que vine corriendo desde la cocina, Corazón ya vienes para aquí? Te echo muchísimo de menos , hace mucho que no nos vemos - me puse un poco melancólica no me gustaba estar lejos de él, me hacía sentir insegura y sola…
-pues por eso te llamaba cielo, es que ha surgido un problema en la reserva y tengo que patrullar con leah esta tarde, pero siempre puedo pasarme por tu casa por la noche, y me hechas una mano con un problemilla que tengo desde que no te veo… ya sabes me pone "ansioso" no verte en tanto tiempo- dijo Paul poniéndole énfasis en la palabra “ansioso” enseguida supe a que se refería y la verdad, no me apetecía nada…
-No, mejor no vengas, tengo que hacer deberes y además mañana tengo clases - dije de mala manera, esto no me estaba gustando para nada, se me hacia extraño que siempre tuviera que patrullar con leah, no había mas lobos? - Y como que te toca patrullar con leah? últimamente solo lo haces con ella, que no está seth o sam? o los demás? - no podía guardarme para mí misma esta rabia que sentía por dentro sabia que a leah le gustaba Paul y haría cualquier cosa para quitármelo…
-mira niña, no te pongas tonta, que sabes que no me gusta, patrulló con leah, porque me da la gana y punto, sabes que no me gusta que te metas en mis asuntos, soy el alfa y decido los turnos y me importa una mierda tus deberes, tus clases y tus tonterías de celos de niña insegura, te guste o no me pienso pasar por tu casa en la madrugada y por tu bien mas te vale tener dispuesta esa boquita tuya para la noche o tendremos un problema entendiste???- contesto Paul enfadado, odiaba cuando sacaba a relucir su carácter lobuno pero eso me pasaba por hacerlo enfadar, sabía que no debía hacerlo pero los celos me comían…
- Lo siento cariño, no era mi intención que te molestaras, solo lo decía porque se acercaban exámenes, y lo de leah tienes razón, si patrullas con ella por algo será - me removía inquieta en mi asiento, no quería que se enfadara conmigo y hubiera la posibilidad de que perdiera el control, sería mi culpa - Haz lo que quieras corazón - dije lo mas sumisa posible, aunque sabía que su amenaza seria cumplida, y no me gustaría, ya que cuando se pone así, es demasiado agresivo en el sexo…
-así me gusta cariño, te veré en la noche si?? además te echo de menos, bueno cielo tengo que colgar, pórtate bien un beso- a veces odiaba ese comportamiento tan volátil, al momento estaba bien y a los cinco minutos se enfadaba, y luego volvía a estar feliz y contento, prefería no preguntar, ya que siempre me decía "son cosas de lobos, todavía no lo controlo" dios quien lo entiende???
- Vale cariño, te esperare, yo también te echo de menos, te quiero mucho, tú me quieres verdad? - necesitaba escucharlo, estos cambios de actitud no me ayudaban en nada a mis comidas de cabeza…
-claro amor, nos vemos en la noche- y sin mas colgó, bueno al menos me dijo que me quería, porque eso significaba que me quería no??? Había dicho "claro amor" dios tengo que dejar de ser tan insegura, siempre me lo decía, pero era imposible, yo era tan poca cosa a su lado…
Me levante del sofá, con la idea de intentar despejar mi mente, haciendo cualquier cosa, cuando caí en la cuenta de que se acercaba la hora de cenar y prácticamente la despensa estaba vacía.
Así que aproveche, agarre mis llaves de casa, mi móvil y las llaves de mi coche y me dispuse a salir al supermercado del pueblo.
Salí de mi casa, cerré la puerta y me subí a mi furgoneta. Prendí la radio, que apenas si me funcionaba, lo cual me recuerda que le tengo que pedir a Paul que me lo revise , si el pobre tiene tiempo…
Ya iba por mitad del recorrido cuando…
"Dios, donde tengo la cabeza, si me dejado la cartera, con que supone que voy a pagar, le voy a decir, mira que cara más bonica tengo, me dejas llevarme la compra a casa? que penosa, hasta en pensamiento"
Y como no, tuve que dar la vuelta perdiendo, tiempo y gasolina. Como la casa es grande y no reparan gastos viva el sarcasmo, me dirigí hacia mi casa, haber si con suerte y no me dejaba nada mas al intentar volver al súper.
“fin flashback”
Mientras Isabella, salía de la ducha, dos sombras corrían por el bosque, hasta la pequeña casa del jefe Swan…
Las cabezas de ambos eran un caos, sobre todo la de Edward, ya que jasper intentaba bloquear los pensamientos, para que su compañero no se enterara de sus propias preocupaciones hacia él.
Sin embargo Edward, iba pensando, en cómo decirle a jasper el plan de enamorar a bella, no sabía como el rubio iba a reaccionar, siempre podía jugar con él, e intentar que el también sintiera algo hacia Isabella…
De repente Edward cambio el rumbo hacia la izquierda y entre la espesura de los arboles jasper pudo distinguir una pequeña casa color crema, De la que provenía el dulce olor de la humana a la que su compañero, hacia poco había estado espiando,
Siguieron hasta el árbol que había enfrente de la pequeña ventana y se encaramaron a el mientras veían entrar a la habitación a una castaña Cubierta con una escasa toalla verde.
A los dos se les hizo la boca agua, Y no solo por su olor Sino también por su cuerpo.
Jasper pensó, que su compañero exageraba, cuando le relato el físico de la castaña, Pero al verla personalmente, supo que no lo hacía, al contrario, se había dejado algunos detalles bastante importantes, sobre su anatomía…
Debajo de la toalla verde, podía entrever unas piernas torneadas, unas curvas deliciosas y unos pechos que cabrían con facilidad en las palmas de sus manos…
De repente el rubio bajo la vista hacia sus pantalones…
"dios ya estoy como una puta roca" pensó el rubio, Mientras Edward se reía por lo bajo Leyendo los pensamientos de su compañeros, que bajo la guardia al ver a la castaña…
-te lo dije jass- susurro Edward, para que la castaña no descubriera a sus visitantes nocturnos…
Mientras observaban como la morena se inclinaba, para secarse el pelo con la toalla Que tenía en la mano. Notaron como la toalla que tenia atada al cuerpo se desprendía poco a poco…
"tío como se le caiga la toalla no respondo, joder, entro y me la follo sin más, queda advertido" pensó jasper a sabiendas de que su amigo lo podía escuchar perfectamente en su mente…
Isabella estaba secándose el pelo, cuando de repente el sonido de su móvil la alerto. Sabía quien era, Y tenía miedo de contestar, No quería que Paul se enfadara, Pero había tenido un día penoso ya que no había parado de darle vueltas a la cabeza, Y no le apetecía verle, ya que sabría lo que pasaría. Mientras tanto un rugido salía del pecho de Edward al leer lo que pensaba bella
"sshh Edward, como te oiga la cagamos, tío que pasa" pensaba jasper,
-no me mandes callar jass no sabes lo que acabo de ver en la mente de la humana, ese hijo de puta que tiene por novio, es un puto licántropo, y no es la primera vez que se le va la mano con ella, ha llegado a violarla, te juro que lo voy a matar, lo buscare y se la cortare a cachitos - dijo Edward en un susurro vampírico para que solo su compañero lo oyera…
Jass iba a contestar, pero de repente escucharon la voz de la chica desde el otro lado de la ventana, estaba hablando con el tal Paul, y podían Escuchar la conversación perfectamente.
Bella contesto al teléfono con un poco de miedo, no sabía el ánimo que tenia Paul en estos momentos.
Aunque él no lo estaba pasando mal, al contrario…
Estaba en casa de una leah bastante ocupada con su cabeza entre las piernas de él, intentando convencerlo de que no quedara con "nerd Swan".
Riiiiinnnnngggg
-hola cariño, como estas? a ido bien la ronda? - no sabía que decir para desviar el tema y no le tocara tener que chupársela, era algo que personalmente ella no disfrutaba.
-uf cielo, pues si la verdad bastante bien y tú qué tal??- dijo un Paul bastante acalorado y con la respiración entrecortada, que no paso desapercibida por ninguno de los tres que escuchaban la conversación.
Ya que los chicos ya se imaginaban que podría estar pasando al otro lado del teléfono…
- cielo te pasa algo? te encuentras bien? se te nota acalorado o que te faltase la respiración quieres que vaya a verte o algo? – “haber si le estaba pasando algo y yo aquí tan paranoica toda la tarde por pensar que me la estaba pegando con leah, si seré mala novia” pensaba bella después de oír a su acalorado novio…
- uff no cariño en seriiiiooo - dijo con la voz un poco ronca y temblorosa- solo que estoy corriéndome, digo corrieeeenndooo por el boque- se oyo una risita al otro lado del telefono "buen juego de palabras, sere gilipollass.. Dios que boca tiene leah joder me voy a correr muy rápido" pensaba Paul, mientras al otro lado de la ventana jasper intentaba calmar la furia de Edward….
-dios lo voy a matar jasper, te lo juro, tiene a semejante hembra y deja que una golfa de cuarta le toque, dios si esa humana fuera mía la trataría como una reina…- decía un Edward cada vez mas enfadado… mientras que su amigo lo miraba extraño
-shhh Edward, al final nos ve… además a ti que más te da como la trate, y cállate quiero oír que hablan…- dijo jass intentando seguir la conversación…
- Paul que eran esas risitas? y estas corriendo por el bosque ahora? - las cosas no cuadraban para bella y no se podía controlar, una cosa es que se sintiera insegura y otra que la trataran como tonta eso si no lo iba a tolerar.
Eso le arrebato una pequeña sonrisa a Edward, al leer sus pensamientos y ver que esta pequeña gatita tenia garras, aunque aun le seguía costando contenerse de no ir a arrancarle la cabeza a ese gilipollas…
-que nada cieeelooo esqueee… estoo… leah está corriendo por el bossquee, detrás de un ciervoooo… si un ciervoooo, queee… diosss, mierda bellaaa, ahoraaa no tenngooo tiempooo, te llamoooo mañanaaa siiiiii!!!!!!!!!!! Jooooodeeeeerrrr adiossss- dijo Paul al otro lado del teléfono, mientras se corría en la garganta de leah. Mientras ella se lo tragaba todo y seguía chupándosela hasta dejarla limpia…
-es un hijo de puta- decía jasper mientras Edward apretaba los puños. De repente algo dentro de la habitación volvió a captar su atención rápidamente…
Bella había tirado el telefono contra la pared, y estaba pensando mil y una formas de matar a su querido novio (nótese el sarcasmo).
Bella no sabía dónde meterse, sentía una rabia que llegaba a limites insospechables, se sentía engañada e inútil, cosa que la hacía sentir muchísimo mas insegura de lo que ya era, “Paul se piensa que soy gilipollas o que, se la he chupado doscientas veces, se como habla cuando la tengo en mi boca, joder hija de puta, será cerda, cuando la pille la mato, aunque me cueste la vida, mujer lobo, mis cojones, lo que es, es una PERRA… es mi novio joder mi novio, será puta, ahora entiendo porque sam la dejo por Emily, dios los voy a matar…” pensaba bella mientras seguía tirando todo lo que tenía a mano… de repente como si una losa le callera encima, cayó al suelo sollozando, y repitiendo –porque si yo le doy todo, lo amo, ella solo lo desea…-
Esos sentimientos, por un momento, perturbaron a jasper y en contra de lo que él siempre pensó y vivió, sintió un poco de congoja y compasión por todo el sufrimiento de esa pequeña humana que los tenía cautivados. Pero no se dejo llevar por eso, si no que se recompuso rápidamente, porque para él esos pensamientos eran un pequeño signo de debilidad. Que no quería demostrar delante de su compañero…
-Edward, debemos hacer algo, aunque me cueste reconocerlo, no me gusta verla así, podría dormirla, y tu ayudarla con un buen sueño…- decía jasper, mientras Edward, tenía otros planes con la pequeña humana, después de oír uno de sus pensamientos…
“seguro que a ella la trata con cuidado, y fijo que hasta le da orgasmos, a mi ni eso, me trata como su muñeca hinchable, los únicos orgasmos que he tenido, me los he provocado yo, ya que siempre le doy todo lo que quiere, joder me ha hecho de todo, le ha dado igual lo que siento, si me gusta o no, me ha hasta obligado a tener sexo anal, y sabe que lo odio, dios ya no aguanto más, quiero dejarlo… no puedo sufrir más…” pensaba bella apenada, sin saber lo que sus pensamientos provocaron a uno de sus acompañantes nocturnos…
-creo que tengo una idea mejor jasper- dijo Edward, mientras tocaba a su compañero, mostrándole los pensamientos que acababa de escuchar en la mente de bella…
-estas pensando lo mismo que yo compadre???- pregunto jasper, mientras Edward asentía, dando comienzo al plan de conquista que empezaba a rondarle en la cabeza…
-duérmela jasper, creo que esta noche dos íncubos le darán placer en sus sueños…- decía Edward, mientras tanto jasper enviaba oleadas de sueño a su pequeña acompañante…
Bella sin poder evitarlo. Y achacándolo al cansancio, trepo a la cama, mientras sus parpados se cerraban pesadamente…
Cuando vieron que la humana estaba profundamente dormida, se adentraron en la habitación, con cuidado de no despertarla…
-muñeca, esta noche será el principio de tu nueva vida, no lo olvides, porque, a partir de hoy, serás tratada como te mereces- susurro Edward, en el oído de bella mientras la tocaba para inducirle el sueño que él quería…
PVO BELLA
Mientras lloraba por todo lo acontecido este horrible día, sentía como una ola de sueño empezaba a cerrar mis parpados.
Me arrastre hasta la cama, y después de tumbarme como pude, caí en los brazos de Morfeo…
De repente oí una voz conocida* que me susurraba al oído
-muñeca, esta noche será el principio de tu nueva vida, no lo olvides, porque, a partir de hoy, serás tratada como te mereces-
Eso me tranquilizo, quería creer en sus palabras, que Paul desapareciera, que todo mi mundo cambiara…
Empecé a tener un sueño muy extraño, dos chicos uno de pelo cobrizo y ojos marrón verdoso y otro rubio y ojos violeta, entrabaron por mi ventana, eran realmente hermosos, uno de ellos, el cobrizo se acerco a mí, sin despegar su mirada de mis ojos, cuando estuvo al lado de mi cama, se arrodillo a mi derecha e inclino su rostro hacia el mío, rozando mis labios tenuemente con los míos, de repente, sentí como el lado izquierdo de mi cama se hundía, y unos labios, empezaban a dejar besos húmedos en mi cuello, mi clavícula y se acercaban peligrosamente a mis pechos…
No entendía nada, quienes eran estos extraños chicos, y porque me sentía como si les perteneciera, mi cuerpo se estremecía ante sus caricias, como nunca antes lo había hecho, mis pezones se endurecieron al toque de los labios del rubio por encima de la toalla, que todavía estaba atada a mi cuerpo.
-shhh mi bella, solo relájate y disfruta, nosotros haremos realidad todas tus sucias fantasías, te amaremos, te haremos disfrutar… siempre serás nuestra…- susurro el cobrizo con sus labios pegados a los míos, antes de atacarlos en un hambriento beso, mientras tanto el rubio, desataba mi toalla y me la quitaba, arrojándola en la mecedora que había junto a la puerta de mi habitación, mientras introducía uno de mis pezones ya endurecidos en la boca, mirándome con ojos hambrientos…
-confías en nosotros bella- decía el cobrizo mientras su mano recorría mi cuello, el centro de mis pechos, bajaba por mi abdomen y jugaba con el hueso de mi cadera.
Yo empecé a sentir como un calor crecía dentro de mí, alce las caderas, esperando que él me tocara en mi coño, ya húmedo y preparado para el…
PVO JASPER
-confías en nosotros bella??- pregunto Edward, mientras yo seguía atacando sus pechos, con mi boca hambrienta, pasando de uno al otro, notando como sus pezones se endurecían al entrar en contacto con mi lengua… note como bella se estremecía bajo nuestro toque y empezaba a alzar la cadera, esperando sentir el toque de Edward de en su húmedo y caliente coño…
-contesta bella, si no, no obtendrás tu esperada liberación cariño, dime si confías en nosotros- le dijo Edward mientras yo subía empezando a besar y morder su cuello y con mi mano seguía masajeando sus pechos…
-si, si, si confió en vosotros, pero por favor…- suplicaba la pequeña humana…
-dinos lo que quieres bella, dinos que nos deseas, que quieres que te follemos duro, que te hagamos correrte hasta que caigas exhausta en tu cama… dilo bella, di que quieres esto…- dije con la voz ronca mirándola directamente a los ojos…
-si. Os deseo, quiero que me folleis, quiero ser vuestra, pero por favor tocarme, os necesito- dijo una suplicante bella, pasando su mirada oscura y lasciva de uno a otro…
No pude aguántame más y ataque hambriento sus jugosos labios
“ábrele las piernas Edward, y chupa su coño, creo que esta humana necesita una liberación, noto su lujuria, y no va a aguantar mucho” pensé sabiendo que mi amigo podría oírme, la humana estaba en una especie de semi inconsciencia, ella pensaba que todo esto era un sueño, pero notaba en sus sentimientos que deseaba que esto estuviera pasando de verdad…
PVO EDWARD
-dinos lo que quieres bella, dinos que nos deseas, que quieres que te follemos duro, que te hagamos correrte hasta que caigas exhausta en tu cama… dilo bella, di que quieres esto…- Le dijo jasper mientras la miraba directamente a los ojos, dios estaba tan caliente en estos momentos, mis pantalones se iban a romper en cualquier momento… pero esto se trataba de bella, ella era la que tenía que disfrutar, no nosotros…
-si. Os deseo, quiero que me folleis, quiero ser vuestra, pero por favor tocarme, os necesito- dijo una suplicante bella, pasando su mirada oscura y lasciva de uno a otro…
Jasper ataco sus labios pensé que la dejaría sin oxigeno, veía su lengua en una lucha eterna con la de la humana…
“ábrele las piernas Edward, y chupa su coño, creo que esta humana necesita una liberación, noto su lujuria, y no va a aguantar mucho”
Pensó mi amigo, yo no le respondí, simplemente ice lo que me pidió, descendí dando besos por el cuerpo de la humana hasta llegar a sus piernas, y puse una a cada lado de la cama, dejándola lo suficientemente abierta para poder llegar a mi objetivo, pase mi mano por su coño, y lo note empapado y caliente, el olor de su excitación me llamaba a probarla, sin más preámbulos me sumergí en el caliente mar de sus piernas, pase mi lengua por su húmedo clítoris y guie dos de mis dedos a su entrada, enterrándolos hasta el fondo de su coño
-o si por dios, masssss, dame mas duroooo por favorrr.- suplicaba la humana, mientras jasper atendía sus pechos mordiendo esos rosados pezones…
-tranquila cariño, todo a su tiempo- dijo jasper mirándola a los ojos, mientras yo seguía chupando su clítoris e introduciendo salvajemente tres dedos en su húmedo y caliente coño…
PVO BELLA
- o si por dios, masssss, dame mas duroooo por favorrr- suplique a mis dos amantes, mientras uno atendía mi palpitante coño y el otro atacaba mis congestionados pezones…
-tranquila cariño, todo a su tiempo- dijo el rubio mirándome con esos ojos que me volvían loca, el azul había sido sustituido por un negro profundo y lujurioso…
-no por favor necesito que me la metas, quiero sentir vuestra dura polla en mi interior- dije en un susurro ronco producto de mi excitación…
-no cariño, esto se trata solo de ti, córrete para nosotros mi querida bella- me dijo el cobrizo, levantando la cabeza de mi coño, mientras seguía penetrando mi interior con sus dedos…
Sus palabras me llevaron a la locura, y sin más me corrí, esparciendo mis jugos en su boca…
Era el mejor orgasmo que había tenido en toda mi vida…
-bella, bella cariño estas ahí…- oí la voz de mi madre a lo lejos, trayéndome a la realidad.
-bella, cariño son las 10 de la mañana… llegaras tarde a casa de tanya, habéis quedado para estudiar…- decía mi madre mientras tocaba a la puerta, en ese momento me desperté, desorientada todavía por el sueño, y sobre todo por el increíble orgasmo que había tenido.
Me levante de la cama a regañadientes y cuando me mire descubrí que estaba desnuda, la cama sin deshacer pero desordenada, la toalla que use la noche anterior encima de la mecedora y lo más preocupante, la ventana de mi habitación abierta… esto era realmente raro…
NARRADOR
Después de que la humana se corriera y se durmiera profundamente, los dos vampiros se levantaron de la cama y salieron por la ventana, sin decir una sola palabra, no había nada que decir, todo había quedado muy claro dentro de esa habitación, la humana era suya, tenían que tenerla, enamorarla, ella sería su consorte, la consorte de ambos por muy raro que eso pareciera, pasaría la eternidad al lado de ambos, lo conseguirían estaban seguros.
-Edward, esa humana tiene que ser nuestra, nunca creí que podría decir algo así, pero siento algo demasiado fuerte por ella, y no dejare que siga sufriendo- decía el rubio ante la mirada de asombro de su compañero
“nunca hubiera creído que convencer a jasper fuera tan sencillo” pensó el peli cobrizo
-tranquilo jasper, ya había pensado en eso y tengo un plan, antes de que acabe la semana, bella estará con nosotros, te lo puedo asegurar, no pienso dejarla en las manos de ese perro- dijo Edward mientras se dirigían a la mansión





*conocida porque anterior mente se habían encontrado en el supermercado…

Bueno chicas que os ha parecido??? Merezco comentarios??? A los vulturis??? No se eso queda de vuestra mano…
Lo siento si he tardado en actualizar, pero he estado bastante liada estos días, por fin terminamos el capi, aunque el lemon lo tuve que hacer sola y la verdad me costó muchísimo, nunca había hecho un trió, espero que no os decepcionara…
Bueno aquí empieza lo bueno, nuestros dos romeos tienen un plan que pasara???

Bueno voy a ser mala… si me mandáis un comentario os mandare un adelanto del próximo capi…
Un besazoooooooooo os quieroooooo

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Que mala de despertarla de su sueñooo!! tengo que decir algo que no me puedo callar MALDITO PAUL!! infeliz... agradesco mucho que hayan suprimido a Jake de esta historia Jajajaaa lo bueno es que Bella tiene a estos dos encantos de hombres para que la complazcan!! si les ha gustado este capítulo esperense a leer los que viene!! Como siempre mis felicitaciones a las autoras hermosas que me dejan publicar su historiaaa!! Les presumo que yo ya tuve el privilegio de leer los siguiente capii y en verdad niñas... les van a encantar los jueves... jaja les mando un beso re grandee!! Perdonenme por lo de luna llena me pase.. pero es muy necesarioo!!
Dejen sus comentarios para la autora que luego se me desanima!! Las quierooo

Capítulo 17: Extraño

Ahora si no tengo excusa... jaja pero aqui les dejo los capis
-¡Si alguna vez te atreves a apartarte de mi, juro que voy a molerte a palos! Espero me estes escuchando, eres un idota engreido, malditos hombres, porqué todo tienen que arreglarlo a golpes- estaba mesandome el cabello y lanzando alaridos, Jacob no se había despertado e emitido ningun sonido que no fueran quejidos, estaba sudando frío y todos estaban muy asustados, yo estaba aterrorizada y ya había llegado al punto de enloquecer tanto que solo se me ocurría soltar tacos, mientras Quil y Embry me miraban con una cara entre divertida y asustada, se apartaban cada que decidía cambiar de lugar en la pequeña habitación y corrian hasta el otro extremo para no interponerse en mi camino, me hubiera divertido, de no ser por la situación en la que estaba y en como me sentía, un quejido salió de la boca de Jacob, mientras se revolvía en la cama, corrí a su lado pasando por encima de Quil y Embry quienes se pegaron a la pared como si se les viniera un vendabal encima.
-¿Jake?- pregunté, mientras cogía su mano, estaba mas caliente que hace media hora, ahora estaba mas arriba de mi temperatura -Despierta cariño- sobé sus dedos -Perdoname no quería decir esas cosas, estaba muy asustada, lo siento- besé su mano, mientras me sentaba en el suelo y recargaba mis brazos en la cama, tomé su mano y enlacé sus dedos con los míos, entonces empecé a hablar con él, me quedé dormida, solo unos instantes porque desperté al poco rato un poco sobresaltada; una mano acariciaba suavemente mi cabeza, alcé la mirada para encontrarme con los profundos ojos oscuros de Jake. Me levanté de la horrible e incomoda postura en la que estaba y me senté sobre mis rodillas, mientras lo miraba.
-Hola- susurró.
-Hola- le contesté, mientras lo revisaba con la mirada. -¿Como te sientes?- le pregunté mientras tomaba su mano y besaba su palma.
-He tenido mejores días- contestó -Pero en unas horas estaré mejor- acarició mi rostro y entonces su mirada se dirigió a mis brazos -¿Tu como estas?- no me pasó desapercibido que su mirada se oscureció, perod decidí no decir nada al respecto, el estomago de Jake sonó, oportunamente.
-Tienes hambre- dije, mientras me paraba rapidamente.
-Estas evadiendo mi pregunta- se incorporó un poco en la cama y me miró.
-No la evado solo priorizo las cosas, eso no es importante ahora- caminé hacia la cocina justo al tiempo en el que Sam, Embry, Jared, Quil y Paul entraban por la puerta, el semblante de Sam era la mascara sin emoción que usaba cuando estaba tenso o había problemas. Sabía de donde venían y me preocupé.
-Hola Bella- me saludó Sam.
-Hola cuñada- dijo el resto de nuevo simultaneamente, me reí.
-Hola chicos-
-¿Está despierto?- preguntó Sam, mientras miraba hacia el cuarto de Jacob, asentí, se giró y se dirigió a su habitación, si quería saber que había pasado el momento de preguntar era ahora, inspiré profundo y lo solté antes de que pudiera acobardarme.
-Sam- dije con la voz mas firme que pude, se giró y clavo sus obscuros ojos en los míos, tenían el mismo color de los ojos de Jake, pero no podía encontrar en ellos nada que me dijera que era mas humano que lobo y me acobardé -¿Ya comieron?- pregunté -Porque puedo prepararles algo si quieren- sorprendentemente me sonrió -Te lo agradecería Bella, si no es mucha molestia, Embry, Jared y Quil no han comido nada, han estado de guardia, Paul y yo no nos vamos a quedar- se giró y entraron en la habitación. Recibí unos amables pulgares arriba de Jared, Quil y Embry antes de entrar en la habitación.
No era tan buena en la cocina como lo era Emily, pero me defendía, preparé un buen omelett, lo mejor que pude con los recursos que tenía en casa de Billy, e hice una nota mental para hacer el super, puesto que me estaba acabando su alacena, lo que sucedió no fue mi intención, fue accidental y sin ninguna premeditación, llevaba la bandeja con la comida para Jake cuando escuché sin querer un fragmento de la conversación.
-... será cuando te mejores, pero no es territorio neutro- no entendí nada, pero ahora mismo mi cerebro no funcionaba muy bien, me hacían falta horas de sueño y un baño, además de que me sentía como 10 años mayor de lo que era. Toqué la puerta antes de entrar, pero no esperé tener permiso, simplemente les avisaba que iba a entrar, la platica podía esperar Jake necesitaba comer para recuperarse y eso estaba primero.
En cuanto entré los chicos desalojaron y Jared, Embry y Quil fueron a zamparse lo que les había dejado en la mesa de la cocina, me reí de sus chistes, me senté en la cama, para ayudar a Jake a comer, me felicitó por mi cocina imporvisada y me regañó ante la idea de resurtir la cocina, pero no me importaba, era algo que iba a hacer de cualquier manera, no supe a que hora se fueron los chicos, y lo unico que supe fue que un momento después llegaron, cambiados, bañados y afeitados.
-¿Que hacen aquí?- les pregunté.
-Somos tu remplazo- me contestó Embry
-¿Remplazo? ni hablar vayanse a descanzar, han tenido un largo día- se miraron unos segundos, luego me miraron de nuevo.
-Bella, son las 10 de la mañana- ¿eran las 10 de la mañana? el tiempo se me había ido en un suspiro, había hablado con Jake durante horas, le había contado sobre un montón de estupideces, mis miedos, mis clases en la escuela, de repente mi mente sintonizó de nuevo la voz de Quil -tu padre ha llamado ya unas 10 veces y sobra decir que el jefé Swan esta furioso y muy preocupado por tí- asentí, pero no me moví, no tenía la menor intención de moverme de aquí.
-Bella, porfavor, si te enfermas Jake nos va a apalear cuando despierte, por no haberte cuidado bien, al menos ve a casa a cambiarte darte un baño, hablar con Charlie y comer algo- su mano se posó sobre mi hombro, suavemente, tal y como lo haría mi madre si estuviera aquí, un gesto suave e insignificante, pero con estos chicos me sentía a salvo.
-No quiero dejarlo- les dije mientras miraba a Jake.
-No se irá ningún lado- dijo Embry mientras se encojía de hombros. -Lo cuidaremos- asentí y me levanté, me acerqué mas a jake, le quité un mechón de su frente y me incliné a dejar un suave beso sobre sus labios
-No tardo- susurré.
Quil me llevó a casa, porque no podía permitir que manejara en el estado en el que estaba, podía quedarme dormida y chocar y ese era un riesgo que no iba a correr, dejé que me llevara y al llegar a casa el cansancio me inundó, no me había dado cuenta de que de verdad necesitaba un baño y tal vez dormir un rato.
Entré en la casa, donde Charlie daba vueltas en la sala, corrió a abrazarme en cuanto cerré la puerta.
-¿Estas bien?- me miró de arriba a abajo y cuando me tomó por los brazos, no pude evitar hacer una mueca, me dolían los moretones y suponía que la mala posición en la que había estado no me ayudaba mucho, pero no se le pasó desapercibido y arrugó el entrecejo -¿Que te pasó? ¿Te lastimaste?- sacudí la cabeza por mero instinto.
-He estado en una posición incomoda, mientras estaba con Jacob-
-Billy me contó, pero me prohibió terminantemente que fuera a buscarte- nos sentamos en el sofá, justo a tiempo, antes de que mis piernas comenzaran a temblar por el esfuerzo de mantenerme de pie.
Platicamos un poco, pero gracias que se dió cuenta que de verdad estaba cansada, además de que no sabía que era lo que le había contado Billy y no quería contradecir nada, subí las escaleras con mucho esfuerzo estaba tan cansada tanto fisica como mentalmente y las dos cosas empezaban a cobrarme la factura, una factura muy alta.
Me bañe con un esfuerzo sobre humano, pero me despejó un poco el cansancio, me puse unos holgados pants y una blusa de manga larga, para ocultar los moretones que ahora tenían un horrible tono morado negruzco, mi cama se veía tan acojedora y calientita, que decidí recostarme un rato, al menos hasta que Charlie terminara de bañarse y pudiera llevarme a la Push, porque se negaba a dejarme conducir, recosté la cabeza en la almohada y cerré los ojos, lo cual fue una muy mala idea...
Me desperté sobresaltada, el cielo estaba obscuro en la ventana, me había quedado profundamente dormida, miré el reloj sobre la mesilla de noche, era la 1 am, había dormido por mas de 12 horas, miré mi habitación y lo sentí, la razón por la que me había despertado, había alguien en mi habitación, Jake estaba herido así que no podía ser el, algo se movió al otro lado de la habitación y mi primer instinto fue gritar.
Pero fue un grito que no fue escuchado, porque mi boca fue cubierta y mi grito de auxilio fue ahogado.
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Se que no me lo merezco, porque el siguiente capi el que les debo lo subiré el sabado... seee ya se dirán que soy una cuentera y que publico cuando me da la gana... no hay una razón mas que la de que no se que hacer ahora con la historia porque se me cruzó una buena idea, pero aún no me decido si utilizarla e integrarla al fic o esperar una mejor ocasion para publicarla , mandenme a los Vulturis si quieren, pero porfaaaaaa porfaaaaaaa comenten! Las quierrooo

martes, 14 de septiembre de 2010

05. Jake & Bella

Ok... si siguen esta historia ya saben de que va el capi, pero lo tengo que decir, contiene LEMMON!! asi que a mis niñas lemmoneras les doy el gusto y a las que no les gusta simplemente saltenseloo no tiene mas relevancia que la obvia!! las amoo


Mi mano estaba enredada en su cabello, sus manos en mis caderas que se movieron hacia arriba recorriendo mis brazos, acariciando mi piel con el dorso de los dedos, su mirada vagando por mi cuerpo al mismo tiempo que sus manos me tocaban; sus manos lentamente se movieron a los botones de mi blusa y comezó a desabrocharlos lentamente mientras su mirada encontraba la mía, sus ojos obscuros me penetraron, el brillo especial en sus ojos cuando me miraba hacía temblar mis piernas y cuando se dio cuenta, me sonrió, con esa sonrisa tan hermosa y franca que tanto me gustaba, los hoyuelos asomandose en sus mejillas y no pude evitar sonreir.

Siguió trabajando en los botones de mi blusa, hasta que logró sacarlos todos de los hojales, sus dedos se pasearon por mi clavicula, dibujando su contorno y luego acarició mis hombros sacandome la blusa y poniendola en la mesa, sus manos volvieron, subiendo por mi cuello, perfilando mi mandíbula para después acariciar mis labios, un suave revoloteo, cerré los ojos y un suspiro se escapó de mis labios que se entreabrian para saborear su aroma, lamí un poco las yemas de sus dedos y succioné un poco su dedo medio, mi lengua con el dulce sabor de su piel, saboreandolo, entonces sus labios rozaron los míos muy despacio, besó mi labio inferior, yo entreabrí mis labios y le devolví el beso, se retiró y recargó su frente en la mía, mientras yo continuaba con los ojos cerrados, contuvo el aliento y supe que me estaba mirando, lo sentía, mi cuerpo reaccionaba ante su mirada, la piel erizandose, mis pezones tensandose, fue entonces que abrí los ojos.

Su mirada bajaba por mi cuerpo, mirando mis pechos presos en un hermoso sostén de encaje negro, mis pezones erguidos, visibles através de la tela, pidiendo atención, relamió sus labios mientras una mano subía lentamente por mi estómago.

-¿Te gusta?- le pregunté y en eso su mirada se dirigió a la mía, en sus ojos no vi nada mas que amor, ese hermoso lazo que significaba algo mucho mas profundo que el sentido literal.

-Toda tú me encantas- me dijo sin dudarlo.

-Me lo compré para tí- le dije con una sonrisa y noté mis mejillas encendidas, un pulgar recorriendolas, calentandolas aún más y su mirada bajó por mi cuerpo.

-¿De verdad?- preguntó

-De verdad- me miró de nuevo y en sus ojos ahora había esa chispa de lujuria, esa chispa que me encantaba, me mordí el labio inferior en espera de que dijera algo.

-Pues me encanta- me besó de nuevo, mas audaz, me aparté rompiendo el beso y pasé mi lengua por el borde de sus labios, provocándolo, mientras paseaba mis manos por su pecho, acariciando los músculos bajo la tela, soltó el aliento y entonces su aroma me enloqueció y mis manos bajaron presurosas por su pecho, llegando a el dobladillo de su camiseta y escurriendose por debajo de ella; acariciando su tostada piel y subiendo la camiseta por su pecho, Jake me miró divertido y me sonrió, mientras alzaba los brazos y se sacaba la camiseta por la cabeza.

Coloqué mis brazos alrededor de su cuello, incliné su cabeza, dirigiendo sus labios a los míos, le di un suave beso, envolviendo sus labios con los míos, protegiéndolos, jalando el suave cabello de su nuca, pegando mi cuerpo al suyo y Jacob medio gruñó, dí un paso hacia atrás, y Jake tensó sus manos en mi espalda ¡Como si pensara que iba a alejarme! ¡Qué tontería! así que lo arrastre conmigo, hasta que mis piernas toparon con el sofá cama y me tiré de espaldas, confiando en la fuerza y los excelentes reflejos de Jake, quién por supuesto me colocó con delicadeza en el sofá, sin soltarme y sin dejar de besarme, lamió mis labios y me besó con cuidado, poniendo su cuerpo sobre el mío, moví una mano, tanteando bajo el asiento, dividida entre la tarea de concentrarme lo suficiente para encontrar la palanca que convertiría el sofá en una cama poco mas grande que una individual, podía sentir la erección de Jake pegada a mi pierna y yo ya me sentía mas que preparada para tenerlo dentro.

Al fín encontre la bendita palanca y el espacio se vio duplicado, puse mis manos en el pecho de Jake y empujé suavemente, el comprendió la indirecta y rodó hasta quedar de espaldas y yo sobre de él. Puso mis manos sobre mi espalda baja, besé su cuello, dejando un rastro humedo de besos, mientras él me besaba justo por debajo de la oreja; sus manos llegaron a mis pantalones y los desabrochó, metiendo las manos por debajo de mi pantalón, acariciando mi trasero ligeramente, comenzó a recorrer las manos hacia abajo, pasandolas por mis piernas al mismo tiempo que bajaba el pantalón, me los saqué y Jake comenzó a acariciar mis piernas, hasta que enrolló una de sus manos en mi cintura sosteniendome fuerte, mientras su otra mano subía y tomaba mi pecho derecho, su boca acarició mi pezón por encima de la tela y un gemido salió de mis labios, su mano masajeaba mi pecho, mientras su boca atendía mi endurecido pezón, restregué mis caderas contra las suyas, sintiendo su poderosa erección contra mí, jake gruño y la vibración combinada con el sonido logró que toda mi piel se erizara.

Su mano se escurrió por debajo de mi sostén y acarició directamente mi pezón, intercambió posiciones y la tortura comenzó de nuevo; los gemidos subían por mi garganta, saliendo en temblorosos suspiros; finalmente sus manos subieron por mi espalda, desenganchando el sostén y liberando mis pechos, que capturó rapidamente con su boca y sus manos y mis brazos comenzaron a temblar, giramos, porque quería los pantalones fuera, mis manos bajaron por su pecho encontrando la brageta y comencé a acariciarlo por encima de la tela, un gruñido muy gutural subió por su pecho y me sentí orgullosa de que fuera yo la que provocara que esos sonidos salieran de su boca.

Su mano acarició mi estómago y bajó hasta mí ropa interior, donde me acarició con el pulgar muy suavemente, me estremecí por completo, mientras cerraba los ojos con fuerza; comencé a bajar sus pantalones, acariciando su trasero y bajando los boxers* al mismo tiempo, luego los bajé con los pies y se los saqueé por completo, a Jake no pareció gustarle estar en desventaja y decidió que mi ropa interior estorbaba, comenzó a bajarla, acariciando mis piernas mientras lo hacía, quedó arrodillado frente a mí, me incorporé ssobre mis codos para mirarlo, su frente y pecho sudaba y brillaba tenuemente por la luz proveniente de la chimenea, sus marcados músculos, su imponente abdomen, y su enorme erección, me puse aún mas mojada mientras lo veía, abrí mis piernas, invitandolo a entrar, el gateó sobre mi cuerpo, besó mi ombligo y mordisqueó el hueso de mi cadera, lamió y sopló sobre mis pezones, dejé caer la cabeza hacia atrás, perdida en el enorme placer y la anticipación, sostuvo su rostro frente al mío, mientras yo enlazaba mis piernas en las caderas de Jake acercandolo a mí, elevé mis caderas restregandome contra él, lo quería dentro, estaba ardiendo de necesidad, esa necesidad de tenerlo tan unido a mí, de sentir que me pertenecía en todos los sentidos.

Me besó, penetrandome con la lengua al mismo tiempo que nuestras caderas se encontraban y tuve que reprimir un grito ahogado, era tan grueso, hacía tanto que no estabamos juntos que estaba un poco desacostumbrada a su tamaño, se movió y un pequeño cosquilleo comenzó a surgir entre mis piernas, le quité el cabello del rostro, mirandolo.

-Te amo- me dijo mientras me embestía tan fuerte que sentí que el corazón se me iba a salir del pecho, arqueé mi espalda, tomandolo mas adentro aún, puso su mano en mi cintura sosteniendome cuando mis músculos se relajaron, me embistió fuerte de nuevo, saliendo de mi cuerpo casi por completo, para volver a entrar con fuerza, cambió el ritmo moviendose a lento, una vez, dos y tres veces; las sensaciones se triplicaron, gemidos comenzaron a salir de la boca de ambos de vez en cuando se podía distinguir un Bella o un Jake, comenzó a besar mis pechos y mis pezones se tensaron.

Mi respiración se volvió entrecortada y me sentí contraerme, apresando la poderosa ereccion de Jake en mi interior, como si tuviera la intención de no dejarlo escapar, conteniendolo en mi interior, bajo el ritmo y aumentó la fuerza, haciendo que el orgasmo me durara aún más y fuera más intenso, mis manos estaban en su trasero, enterrando las uñas en él, lo besé con fuerza y comencé a moverme, giramos, ahora era mi turno de darle un orgasmo.

Me moví sobre el, sacandolo de mi cuerpo y dejandome caer con fuerza, las caras de Jake eran tan excitantes, mis pechos moviendose al vaiven de nuestro ritmo, acaricié sus testículos con ternura, mientras preciosos gemidos se escapaban de su boca, le sonreí, tomé sus manos y las coloqué en mis pechos, el comenzó a masajearlos lentamente, lo cabalgué rápido, alternando entre movimientos circulares y laterales, lo sentí tensarse y sus abdominales se marcaron aún más, así supe que estaba por venirse, aumenté la velocidad y cuando las manos de Jake se movieron a mis caderas para dirigirme, hice exáctamente lo que el me indicaba, gritó mi nombre mientras se corría, lo sentí llenarme, por completo, tal y como hacía siempre, tanto si teníamos ropa puesta como si no la teníamos. Era el hombre de mi vida y lo amaba con el alma.

Me derrumbé sobre su pecho y el me acurrucó entre sus brazos, en donde estaba muy cómoda, no teníamos una cobija a la mano, pero ninguno de los dos quería separarse del otro, enlacé mi pierna con la suya, recargué mi cabeza y lo besé suavemente.

-Te amo- le dije

-Yo te amo también- me respondió.

Era todo lo que cualquier chica podría pedir, era todo lo que yo quería.

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Muy bien mis niñas lo he escrito con todo el amor del mundo para ustedes espero les guste les pido dejen sus comentarios, aunque algunas por ahi... digan que siempre me dejan lo mismo, se los agradesco, no me canso de leerlos. Las quiero muchisimo, de verdad que todas ustedes significan mucho para mí. Les platico que he tenido un muy buen día, dormir 4 horas diarias durante la ultima semana ha rendido su fruto y he salido muy bien en mis primeros examenes en la Universidad! Asi que felicitenme! :D es por eso que no pude subir capi de Luna Llena pero mañana subiré los dos... ya estoy libre y lo mejor de todo... Tengo Mega puente por el bicentenario y centenario de la independencia y la revolucion mexicana! Viva mi Mexico caraii!!

Las amoo...

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*Boxers: Jake si usa boxers aquí, pues no es un licantropo! :D

viernes, 10 de septiembre de 2010

Capítulo 11: Disculpas


Al menos alguien se había apiadado de mí y había decidido que eran ya demasiadas emociones para mí, porque por gracia divina se canceló la visita al concejo y pude retirarme a mis "apocentos" que palabra tan fea, cuando llegué me alegré solo por unos instantes de que Saskia estuviera ahí para ayudarme con Liza cuando se levantara, porque aún no estaba despierta, no me había ausentado durante mucho tiempo, pero Liza ultimamente estaba durmiendo mucho, lo cual no era normal para ella, quien en ocasiones tenía demasiada energía como para concentrarse en dormir, pero inmediatamente me arrepentí, así que le pedí a mi "tía" que se retirara, para que yo pudiera tener un tiempo a solas y pudiera ordenar mi cabeza, mi hermanita no representaba ningún problema, siempre podía hacerme cargo de ella.
Literalmente me desvanecí en el cómodo sillón blanco, donde recargué hombros y cabeza por igual, el rellano del sofá se amoldó perfectamente a mi cuerpo, tanto que bien podía quedar mi marca impresa una vez que me levantara, me pregunté si sería verdad y mi mente se planteó seriamente la posiblilidad de comprobarlo, pero mi cuerpo simplemente se reusó a cooperar, comencé a divagar por la habitación con la mirada intentando distraer mi mente, pero esta enfadada por no haber podido comprobar la teoría de mi figura impresa en el sofá, decidió castigarme dandole vueltas a el tema que me tenía tan molesta y confundida. Eric.
Tenía tantas preguntas en mi cabeza ¿Que demonios estaba haciendo aquí Eric? la cual no era nada sencilla de responder y con esta pregunta venían otras; ¿Donde demonios es aquí?¿Quienes son estas personas? ¿Que hago yo aquí? Pero de todo lo que mas me había desconcertado era, que rayos había sido eso de -un placer su majestad- con eso daba a entender que no me conocía, que jamás en su vida me había visto y luego quedaba el asunto de -Majestad- ¿Que coño? en que tremendo lío me había metido.
Contemplé la banda dorada en mi dedo anular, aquel anillo que era idéntico al que estaba sujeto en mi cintura, ¿Que hacía tan peculiar a este anillo para que pudiera ser fuente de tantos problemas? Un ligero golpe en la puerta me hizo levantar la cabeza de su comoda posición en el respaldo del sillón.
-Diga- pregunté mas refunfuñando que nada.
-¿Majestad me permite?- contestó una aterciopelada voz que no reconocí, pero dado que no conocía a muchas hombres y esta no era la voz de Eric, quedaban dos personas, el tal Alexander y Solin, dado que Solin carecía de cuerdas vocales que le permitieran esa clase de tono, supe quien era y aunque el tipo fuera un dios en persona me encontré resoplando; ahora mismo no tenía ganas de fingir algo que no soy, ni siquiera sabía que se suponía que era lo que fingía.
No me tomé la molestia de levantarme, supuse que podía darme el lujo simplemente por el hecho de que me llamaban majestad, si era una buena o mala suposición, en este momento no me importaba, simplemente miré si mi vestido estaba bien colocado me senté un poco más recta y dije con voz firme y autoritaria o al menos lo intenté:
-Adelante- Alexander entró con paso firme y galante, se paró frente a mí, juntó sus manos entrelazando los dedos y colocó sus pulgares en la frente para inclinarse brevemente frente a mí, cuando se levantó hice mi ya normal movimiento con la cabeza sin decir nada porque no sabía que decir.
-Majestad, vengo en nombre de su abuela a indicarle que sus lecciones inician mañana a medio día, espero no tenga inconveniente- me pregunté que clase de lecciones serían y que hora significaba medio día, para mí, medio día eran las doce, mientras que para otras personas medio día representaba la hora de la comida, las dos de la tarde, asentí levemente, el me miró unos instantes y su mirada ni me inmutó, se retiró con el mismo ritual de la reverencia y yo no dije ni una palabra.
Volví a recostar mi cabeza y cerrar mis ojos unos momentos, estaba cansada, cansada mental y emocionalmente, cansada de la insertidumbre, cansada de tener miedo por mi madre, por Liza, cansada de ver todas las mentiras que rodeaban mi vida, cansada de la farsa, cansada de no poder dormir tranquilamente, cansada de pensar, de pensar en las preguntas que rondaban en mi cabeza y me acechaban por las noches, tan cansada que estaba apunto de caer rendida ahora mismo, apenas y escuché el leve toque en la puerta, apenas antes de caer dormida, apenas si pude mover los labios y obligar a mis cuerdas vocales a emitir una palabra coherente.
Con todo el pesar del mundo obligué a mi nublada y atormentada cabeza a dirigir la vista hacia la puerta y ahi estaba; mi mejor amigo, un mejor amigo al que ya no conocía, mas bien, al que nunca conocí, lo miré y por primera vez no sentí la profunda calidéz inundandome, la tranquilidad llenandome, esta vez la neblina en mi cerebro fue retirada y las neuronas funcionando correctamente, fríamente, siempre había sido controlada, calculadora, precisa, oportuna, me alegraba no dejar ver mis sentimientos, eran pocas las personas con las que me permitía ser abierta, me costaba ser extrovertida y una de esas personas era Eric, la mala noticia era que Eric mi mejor amigo ya no estaba muy segura si existía.
Lo miré, sosteniendo su mirada simplemente esperando a que él fuera el que dijera algo, algo que me dejara entender y comprender porqué estaba aquí, algo que explicara todo este enredo, que me ayudara a tranquilizarme a no sentir que había sido traicionada a no sentir que no podía confiar en nadie, a no sentirme incompleta.
-Sam- dijo y me alegré de que no usara la estupidez esa de "majestad" o si no juro que le hubiera pegado con algo -Lo siento- ah eso si me hizo enojar, las disculpas no eran lo que quería, quería razones.
-Quiero razones no disculpas-
-No puedo-
-¿Como que no puedes?-
-No puedo-
-mas bien no quieres- dejé caer la cabeza hacia atrás y cerré los ojos, dejé salir un profundo suspiro, de esos en los que dejas fluir los sentimientos. -Al menos no mentiste en tu nombre-
El silencio fue lo unico que se escuchó y comencé a preguntarme, si no se habría ido ya. Levanté la cabeza sin abrir los ojos, retrazando el momento de mirarlo de nuevo o de confirmar que se había ido, los abrí y ahi estaba inclinado frente a mi su mirada verde profundo prendida en mi mirada, ahogué un pequeño grito y entonces me tomó por los hombros y me levantó con tanta facilidad que en un momento ya estaba frente a él, me abrazó, rodeando mis hombros con sus brazos, me quedé tiesa, sorprendida y entonces cerré los ojos y recargué mi cabeza en su pecho, envolví mis brazos en su cintura, sosteniendonos el uno al otro, como cuando eramos pequeños, mientras el susurraba.
-Lo siento sam, lo siento, siento no poder decirte la verdad-
Y muy en el fondo yo también lo sentía.